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Crónicas - May 24, 2012

Santa Marta, donde la nieve y el mar se unen

 

Desconectarse del ambiente laboral y romper con la rutina diaria requiere de una planeación especial. Si la idea es  salir de vacaciones a un destino diferente, cargado de nuevas emociones y mezclar  el descanso con el turismo de aventura, nada  mejor que  visitar la bahía de Santa Marta para experimentar los beneficios de un viaje lleno de sorpresas, pues es un puerto que posee  el único macizo montañoso con nieves perpetuas al lado del mar.

 

Santa Marta está situada a orillas del mar Caribe y es la ciudad más antigua de Suramérica, fue fundada por el conquistador Rodrigo de Bastidas, en  1526. Su Catedral Basílica fue la primera construida en América e históricamente representa un Santuario de la Patria, pues en su Quinta San Pedro Alejandrino murió el Libertador Simón Bolívar.

Una  de sus mayores  virtudes es poseer un  puerto de calado natural, con una profundidad de sesenta  pies, lo cual le permite tener una importante actividad comercial, ésto sumado a su  nueva Marina Internacional la proyecta como uno de los centros de emprendimiento turístico y comercial más importantes de la región.

De acuerdo con el informe especial de la revista Semana, sólo en el 2011 llegaron trescientos setenta mil  embarcaciones de ocho países diferentes,   tripuladas por cerca de mil navegantes que planearon estar tres días en promedio y se quedaron más de diez. ¿Pero qué brinda la histórica ciudad de Santa Marta para ser un destino irresistible en vacaciones? Abanico les revela sus secretos.

Las Rutas de la Sierra Nevada
Descubrir una montaña con todos los pisos térmicos, desde el cálido seco hasta nieves perpetuas, acompañada de una fauna y flora exuberante, es la mejor sugerencia para los amantes de la naturaleza. De acuerdo con Luis Schneider Gerente Cooperativa Multiactiva de Ecoturismo Rural de la Sierra Nevada de Santa Marta, lo ideal es hacer una caminata ecológica hasta la cascada de Pozo Azul, pasando por Minca, Campano y la Tagua, luego a unos veintitrés kilómetros a una altitud entre 1600 metros  y 2200 metros se puede visitar la reserva El Dorado, para observar trescientas especies de aves, algunas de las cuales son endémicas. El tour a la Finca Santa Helena es otra gran aventura, pues  incluye recorrido a pueblo indígena Wimaque de la etnia Wiwa y al cerro Kennedy a unos 2.800 metros  de altura  sobre el nivel del mar, para apreciar los nevados. Para los más trotamundos,  se ofrece el circuito de  ocho días hasta la comunidad indígena Kogui de Mamarongo, para observar de cerca  los picos Cristóbal Colón y Simón Bolívar.

Asimismo, en la vía Fundación, en la bodega de Sevilla se sube hasta Palmor, un corregimiento netamente cafetero, allí se produce la mayoría del café que se da en Sierra Santa Marta, café tipo exportación. Es un paseo eco turístico, la idea es observar las lagunas y los nacimientos de agua del rio Sevilla y Rio frio. Si alguien llega hasta el Palmor y se entusiasma con la idea de continuar hasta los Picos, se le alquilan  equipos y ropa para  esquiar, pues hay  una ladera extensa, no tan amplia como las que existen en Canadá o Suiza, pero la experiesquiarencia es única.

Para subir a la Sierra Nevada se deben llevar zapatos adecuados para caminar, botas ligeras, no llevar mucho peso en los maletines o mochilas. Es recomendable vacunarse contra la fiebre amarilla antes de venir,  llevar ropa ligera, manga larga y pantalones hasta el tobillo para evitar picaduras de mosquitos. Los grupos van acompañados de paramédicos, con seguros médicos incluidos y los paquetes también incluyen las comidas.

En 1980 la Sierra Nevada de Santa Marta fue declarada “Reserva del Hombre y de la Biosfera” por sus características,  la Unión Mundial para la Conservación de la Naturaleza la declaró ecosistema prioritario en Suramérica para su conservación. Ahora bien, los picos Colón y Bolívar también se pueden observar desde el puente del río Palomino, sobre todo en las horas del amanecer, se puede disfrutar de una vista clara y sorprendentemente pero la ruta seria visitando  la cuenca del río Don Diego desde la unión con su afluente el Don Dieguito hasta su desembocadura con gran afluencia de aves, micos, iguanas y babillas.

Como el  interés por este destino se ha desarrollado recientemente, existe una oferta considerable de alojamientos en la zona como ecohoteles,  fincas eco turísticas y cabañas sobre la playa o en las riberas de los ríos, los cuales  han abierto sus puertas con tarifas que se ajustan a todos los presupuestos,  todas ellas extraordinarias por su infraestructura,  servicio personalizado y  un respeto total por el medio ambiente.

Un Paraíso Ecológico.
El corregimiento de Minca es un pequeño poblado de quinientos habitantes, enclavado en las estribaciones de la Sierra Nevada y perdido entre la frondosa vegetación, está situado a e 14 kilómetros de Santa Marta y se recorre en 25 minutos, en carro. Las aguas cristalinas del rio Minca y su inmensa vegetación verde, guardan bajo  tierra la riqueza arqueológica de sus antepasados, este increíble escenario sirvió en el pasado como hábitat de la cultura Tayrona .

Minca tiene muchos sitios para alojamiento incluyendo ecohabs, es un rincón de pintores, escultores y artesanos. Asimismo se pueden encontrar una amplia gama de restaurantes de comida colombiana e internacional.

Bienvenidos al Parque Tayrona
Entre los atractivos más conocidos del Parque se encuentran Quebrada Valencia y Ciudad Perdida. Esta  zona está llena de lugares magníficos  por descubrir, nuevas rutas de senderismo que llevan a quebradas, cascadas o ríos  ideales para un paseo en bote,  avistamiento de aves, visitar reservas arqueológicas, plantaciones de flores exóticas y comunidades indígenas.

Uno de los recorridos obligados es la caminata ecológica desde el Parque Tayrona donde existen zonas de camping, Ecohabs preciosos, hasta el Cabo San Juan, que  también tiene un espacio reservado para acampar. No se  recomienda bañarse en el mar durante el trayecto hasta no haber llegado a la Piscina, una barrera natural de corales que conforma  una especie de alberca  o hasta el cabo San  Juan, pues el oleaje es  más calmado.

Existen dos destinos  altamente recomendados para los amantes del sol y el mar que  son  Playa Cristal y Bahía Chengue. Para poder disfrutar de estas paradisíacas playas, la ruta que se debe acceder por Neguaje, que es la bahía más grande del parque Tayrona ubicada a  45 minutos del centro de Santa Marta.  Playa Cristal es considerada como una de las zonas de mayor importancia ecológica del Caribe Colombiano con aguas cristalinas, arenas blancas y hermosos arrecifes coralinos ideales para la práctica de snorkelling. Chengue  es una bella y solitaria playa situada en el sector de bosque seco tropical, su vieja salina y su ciénaga llena de vida son ideales para el avistamiento de aves.

Adicionalmente,  Santa Marta ofrece a los bañistas muchas playas alternativas desde las tranquilas aguas de la Bahía, donde está el Morro; el Rodadero,  Playa Salguero, Casa Grande, Cinto,  Wachakyta, Bonito Gordo, Inca Inca,  Playa Blanca,  Playa del Muerto, Bello Horizonte. Si la idea es obtener un bronceado que perdure  por varios meses,  el abanico de opciones que brinda la ciudad para disfrutar del mar y del sol, es increíble.

Un pueblo de pescadores.
Ubicado a solo quince minutos de Santa Marta se encuentra  otro corregimiento llamado Taganga, este agradable pueblo de pescadores se ha convertido en el punto de encuentro de muchos excursionistas extranjeros, a tal punto que en sus calles se escucha hablar inglés, francés, alemán con mucha frecuencia y constituye una de las más importantes estaciones de buceo del Caribe colombiano, pues ofrece cerca de treinta lugares para  bucear, la mayoría localizados en el parque Tayrona en un sector conocido domo La Aguja.  Asimismo, es un rincón de artistas y artesanos por excelencia que brinda a sus visitantes la oportunidad de descansar en simpáticos hostales como La Casa de Felipe, Aroma de Mar, hasta hoteles tradicionales como La Ballena Azul.

Los pobladores de Taganga viven básicamente de la pesca artesanal, la cual está organizada por clanes o familias, cuenta con restaurantes típicos, otros de comida internacional, al igual que  simpáticos cafés y bares con la mejor selección de música colombiana  y del mundo.

Un paseo romántico.
Quienes aman la historia, se podrían comenzar por un city tour a pie en  el centro histórico de Santa Marta, el cual está lleno de calles angostas y casas enormes.  El centro  es romántico y conserva un estilo  colonial, se destacan la Catedral, el Convento Santo Domingo, el Museo del Oro Tayrona,  la Casa de la Aduana, el Claustro San Juan de Nepomuceno,  la casa Madame Agustín, el parque de los Novios, La Iglesia de San Francisco, el Parque Simón Bolívar, la Gobernación del Magdalena y la Alcaldía distrital.

Muy cerca a estas edificaciones está la carrera primera y su pintoresco camellón desde donde se puede observar un atardecer frente a la bahía y combinarlo  con un corto recorrido por la  Marina Internacional.  Las opciones culinarias hacen parte del atractivo de la ciudad  pues existen desde los restaurantes típicos tradicionales como el Panamerican,   hasta franceses como Basilea;  tailandeses, japoneses, italianos, cubanos, de comida fusión, criolla  o mediterránea, al  igual que interesantes cafés literarios  como La Canoa.

A cinco kilómetros  del centro, en el corregimiento de Mamatoco, está la Quinta de San Pedro Alejandrino, hacienda que fue prestada para hospedar al Libertador Simón Bolívar  hasta sus últimos días y donde se  encuentra el Museo de Arte Bolivariano, con una muestra que supera 200 obras, una colección permanente que reúne obras de artistas destacados de países bolivarianos y otros de América Latina, con una importante muestra de pintura, escultura, grabado, dibujo, ensamblaje acuarela, collage, instalación fotografía y video-arte.

Finalmente, para cerrar con broche de oro el tour por la ciudad  un recorrido por el barrio Pescaito donde nació el reconocido jugador de futbol Carlos “El Pibe” Valderrama,  con una parada en la tradicional cancha La Castellana  semillero de futbolistas samarios y para rematar,  una parada en la  estatua del Pibe, ubicada a la entrada del estadio Eduardo Santos.


Sugerencias gastronómicas

Restaurante Galería Mailia, Restaurante Isola Sarda pizza, pasta; Toro Negro,  Chucho Gourmet, Tierra Negra,  Vinería  El Sabor de Italia,  Basilea, El Panamerican,  El Fogolar,  Rocoto, Muelle 8, La Baguetina, Atrapalo, Atto Sushi Bar, El Santo, Ombu de Poncho Rocha, Restaurante El Bistro,  Santa Mesa, Restaurante Made in Spain, Piza Leña,  Sabor de Italia,  Agave AzulSiriacaOuzo,  El Chef del Mar, Babaganoush,  Café del Mar, Café Bistro,  Son y Tapas, Pizza Loca, Quinta Imera

Bares
Ibiza Cafè, Crabs, La Yarda, Tumbakatre,  Comodoro, Atto, Lulo, Burukuka, La Escollera,  El Garaje Bar, Antic, Tanganga extreme,  La Puerta, Matimba,  Tocata Café Bar,  Son Tapas, Roots and Sounds, Santorini, Zooms Bar, Ben and Josep´s.

Café Arte

Altamar- Rodadero. La Canoa (Santa Marta)

Hoteles
Irotama, El Zuana,  Santa Mar Hotel,  Decameron Galeòn,  , Santorini Hotel Resort,  Tamaca Yuldama Rodadero,  La Sierra.

 

Ecohabs

Ecohabs del Parque Tayrona.

Ecohabs de Minca.

 

Hotel Boutique

Casa del Agua Santa Marta,

Casa de Isabella Hotel Boutique

Hotel Boutique Casa Verde

 

Cabañas

Villa Naloy

 

Camping

Casa Grande Surf

Hostales en Taganga: Aroma de Mar, La Casa de Felipe, La Tortuga Hotel, Cabañas Luz de Luna.

 

Fotos: Luis Guillermo Rodriguez, Luis Schneider, Casa Grande Surf, Alfonso Rocha, Ibiza Bar

 

 

Especial para Abanico Magazine– Toronto. www.abanico.ca. Potada edición  junio-julio 2012

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