México lindo y querido.

Recorrer México en 25 días es una tarea titánica e imposible. Sin embargo, en un par de semanas pude visitar varios sitios turísticos y quitar de mi mente los titulares amarillistas de cuantos muertos hay semanalmente en este país producto de la cruenta a guerra entre los carteles de la droga, pues todo esto lo he reemplazarlo con paisajes extraordinarios, descubrimientos gastronómicos y la amabilidad de la gente mexicana. Aterricé en el DF con la amenaza del coleteo del huracán Alex, que se dirigía hacia el Golfo y a escasas horas de un temblor de tierra de 6.2 grados que sacudió el sur del país Azteca. Además había escuchado un par de historias de horror que parecían extraídas de un capitulo de “ Tales from the Crypt ” , que me animan hoy a escribir breves blogs sobre un viaje muy agradable y seguro que hice a México.

Sin lugar a dudas, el DF es una ciudad gigantesca, 24 millones de habitantes lo comprueban y al igual que en muchos países

latinoamericanos, la pobreza y la riqueza conviven de una manera apabullante, además los sitios pasan de moda rápidamente, es así como en una época alojarse en la Zona Rosa era muy chic, ahora Polanco o Santa Fe son los sectores de mayor categoría para disfrutar hoteles y restaurantes del momento.

No pretendo describir en detalle mi experiencia al recorrer el DF, Toluca, Puebla, Cuernavaca, Taxco,

Acapulco, Ixtapas, Manzanillo, Puerto Vallarta, Guadalajara, Cancún, isla Mujeres, Xcaret y Playa del Carmen, simplemente darles algunos datos que los motiven a descubrir este maravilloso país.

. Uno de los sitios que se quedará por siempre en mi memoria es el santuario de la Virgen de Guadalupe en ciudad de México, el cual es visitado por cerca de veinte millones de personas al año, allí se puede constatar uno de los milagros de La Virgen Santísima quien se apareció en el Tepeyac, al indio San Juan Diego el martes 12 de diciembre de 1531. Desde hace 200 años la imagen de la virgen sigue intacta en el poncho o ayate de Juan Diego y se puede admirar en la nueva basílica construida en 1976, es impresionante.

Otra visita impactante son las pirámides de Teotihuacan, (un nombre que aún no logro pronunciar bien) que fue inscrita como patrimonio Universal por la Unesco en 1987. Vale la pena visitar estas pirámides , subir hasta la cima porque el panorama es espectacular, además se aprende mucho sobre los hallazgos arqueológicos y las historias míticas de las pirámides Sol y Luna.

El DF tiene muchos museos, pero me encantó el Museo Nacional de Antropología, allí está todo el pasado de México, las civilizaciones Mayas y Aztecas en su esplendor. Como complemento, fui a ver el Ballet Folklórico de México de Amalia, Hernández, que me había recomendado Manuel Montolongo, director de turismo México en Montreal, quien se quedó corto en halagos, pues es un excelente espectáculo! El famoso zócalo o plaza central del DF también es muy interesante al igual que todo el centro de la ciudad donde se puede constatar los vestigios del imperio francés, cuando Maximiliano fue nombrado emperador en México, como en la famosa calle Reforma.

Las tradiciones cuentan mucho en Mexico y por fin pude aprender más sobre los festejos del día de los muertos una fiesta que celebran los mexicanos aqui en Montreal y en muchos ciudades del mundo y se encuentra representada en la pintura, ceramica, artesanias, etc

Debo confesar que intenté descubrir la mejor Margarita, por eso probaba una en cada restaurante, el ganador fue el restaurante El Santo Coyote en Guadalajara donde me ofrecieron una Margarita de Tamarindo, delicosa y el segundo lugar lo obtuvo el restaurante Tequila Grill en Cancún, allí el mesero me recomendó pedir siempre la Margarita a las rocas y no frappé.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

En cuanto a las delicias gastronómicas, me deleité probando todo tipo de guacamoles porque el aguacate en México es cremoso, tiene sabor, es simplemente delicioso. Probé también la famosa barbacoa que es una carne (pollo, conejo, pescado, cordero) asada al estilo tradicional o “barbacoa”, envuelta en hojas de Maguey. Otro dos descubrimientos gastronómicos fueron el “nopal” y la jicama. El nopal o nopalito es un cactus que se puede comer con las ensaladas o como antipasto, o asado con rodajas de queso, que le atribuyen propiedades curativas enormes. La “jicama” es un vegetal sabroso puede parecerse al pepino aunque es más dulzón, incluso lo dan en trocitos como picaditas o como pasante cuando se hacen las degustaciones de tequila.

En Cancun pude asistir a un excelente espectáculo en la hacienda SISAL, una muestra folklórica y gastronómica completa, que lo recomiendo a ojo cerrado, al igual que las hermosas playas de la Rivera Maya.

Finalmente, en Acapulco tuve la ocasión de hablar con un taxista y preguntarle cómo había afectado la violencia al turismo en México. El señor * Carlos * dijo que lamentablemente había mucha corrupción en el país, que si bien la guerra es solo entre narcotraficantes, los turistas se asustan y no vienen, pero en realidad no tienen de qué preocuparse, pues la violencia está localizada. De otra parte,

Carlos asegura que mucha gente en México no le perdona a Vicente Fox que durante su administración se hubiera liberado al narcotraficante alias “Chepe” . Varios taxistas como él, deben pagar un boleteo, proveniente de grupos que supuestamente les brindan seguridad, pero les hacen competencia desleal con taxis nuevos. Para Carlos existe mucha complicidad entre el Gobierno y los narcotraficantes por eso la guerra se recrudece cada día más.

Los invito entonces a conocer bien la realidad de México, a documentarnos, pero sobre todo a preferir siempre la historia, gastronomia, cultura y todas esas maravillas que brinda el pais Azteca.