Montreal Triple X

Existen muchas maneras de celebrar el día de San Valentín, particularmente me encantan los regalos, las sorpresas, las cenas íntimas, flores, chocolates o libros, pero es obvio que no todo el mundo festeja de la misma manera, para la muestra tenemos el tradicional Salón del Amor y la Seducción que siempre abre sus puertas en el estadio Olímpico, como un preámbulo del día de los enamorados.

La versión 2009, trae muchas manifestaciones de fetichismo, hedonismo, shows, 281 demostraciones como “orgasmo para todos” o “sexo oral sensacional” y de nuevo los protagonistas de la Industria del Sexo en Montreal se dieron cita para mostrar sus novedades en cine porno, libros de sexo, clubes de intercambio de parejas, juguetes sexuales, ropa íntima, juegos de video, etc. Yo quise aprovechar esta coyuntura para hacer algunas reflexiones sobre esta jugosa industria que le genera ganancias a Quebec por cerca de 350 millones de dólares al año, con un crecimiento del 4% anual, esto sin contar los servicios indirectos como hoteles, alcohol, drogas, restaurantes, taxis, escoltas, etc.

 

No se si muchos lo saben, pero Montreal se conoce también como el Disney World de los adultos, pues es una de las diez ciudades más famosas del mundo por sus bares swingers e internacionalmente destacada por sus servicios de escolta, tiendas de sexo, juegos de video, candentes bares gays, bailarinas nudistas y restaurantes abiertos 24 horas con meseras desnudas para atender los pedidos de sus clientes.

Toda esta apertura al libre desarrollo de la personalidad es interesante, en especial porque me gusta ver ciertas analogías entre las reglas tan estrictas que siguen los ciudadanos, como vivir alertas a las multas de tránsito, correrle a la policía para evitar el consabido “ticket” o acatar la implementación de programas preventivos como la ley antitabaco que prohíbe fumar en sitios públicos y obliga a los fumadores a echar humo en la calle a menos 30 grados; o apoyar las campañas publicitarias a favor de la preservación del medio ambiente, o rasgarse las vestiduras por la protección de los animales. Pero personalmente no he visto tanta preocupación en Quebec por controlar las repercusiones sociales de la expansión de la industria del sexo o una mayor presencia publicitaria de prevención en una población tan vulnerable como son los jóvenes tanto quebequenses como inmigrantes, ni siquiera en los discursos políticos. De hecho hay disposiciones que propician su aumento como la legalización en el 2005 de los clubes de intercambio de pareja o swingers, por parte de la Corte Suprema de Canadá.

Sin embargo todo indica que al menos aquí en Montreal el sexo mueve millones, de acuerdo con sexwork, existen además más de 5mil escoltas y 200 agencias dedicadas a este servicio, el cual según los expertos se ha vuelto cada día más lucrativo si se tiene en cuenta que la mayoría de edad para consumir alcohol en Quebec es de 18 años. Asimismo el fetichismo goza de mucha popularidad, existen tiendas especializadas en ropa de cuero, cadenas, esposas, látigos y toda clase de accesorios, como bares exclusivos con películas XXX, o si se prefieren bailarinas en la mesa, por solo 10 dólares CAN y de manera legal.

La industria de películas porno es otra fuente grande de ingresos, por algo Montreal recibe el apodo de “la Ninfa del Sexo”, los periódicos locales están llenos de avisos para reclutar modelos, actores y obviamente el Internet lidera la nueva era del cibersexo, son miles de sites webs dedicados al negocio y coincidencialmente uno de los más promocionados aquí es el de la actriz porno nacida en Edmonton Ontario, Carol Cox quien desde 1994 es la reina del ciber espacio en Montreal. . Esta veterana del sexo es quien entrena las nuevas generaciones de estrellas pornos en el Internet, es muy solicitada, a pesar que sus atributos distan mucho de ser la belleza, sensualidad o el arte.

Como complemento a este coctel porno esta el barrio gay de Montreal mundialmente famoso por sus spas, salas de masajes, shows, restaurantes, las populares “Drag Queens” con sus bingos de sexo, todo en un ambiente exótico, chic y moderno de la muy transitada calle Sainte- Catherine.

¿JUVENTUD DIVINO TESORO?

En medio de esta industria de desenfreno sexual, siempre se mezclan las drogas, la mafia y últimamente las pandillas callejeras, así lo comprueba la serie de reportajes que realizó Caroline Touzin, periodista de La Presse, quien se dio a la tarea de hablar con varias prostitutas y reconfirmar que quienes mueven los hielos del poder ahora son los llamados “gangs de rue”.

Touzin hizo un recorrido por las zonas de tolerancia de la ciudad y escribió una serie de crónicas en el 2008 que son inquietantes pues las jóvenes que se dedican a la prostitución son marcadas con hierro, golpeadas, quemadas maltratadas y por mas que la policía se esmere, las investigaciones pueden tomar mucho tiempo, pues las victimas, en su mayoría adolescentes se rehúsan a acusar a sus agresores por temor a las represalias del proxeneta que las controla.

Si bien la prostitución es legal en Canadá y ha estado en el Código Federal Criminal desde mediados de 1800, es importante analizar las repercusiones sociales como es la explotación sexual de menores, pues a pesar de los esfuerzos de la policía de Montreal, este fenómeno tan antiguo en la humanidad parece no tener fin, curiosamente los sectores clasificados “de zona roja” como Saint-Michel, Hochelaga-Maisonneuve , Saint-Henri o sectores de Ste Catherine Est, comparten un mismo denominador común: pobreza criminalidad, droga y prostitución.

Por otra parte, el flagelo de la pornografía infantil, hace presencia en Quebec, es asi como en el 2008 la policía arrestó 27 personas que hacían parte de una red de Internet en Europa y la mayoría de las victimas eran niños estudiantes de primaria, incluso encontraron un bebe, todos estos sujetos fueron acusados de preparar y procesar material pornográfico de niños.

Curiosamente, la Asociación Canadiense de Médicos CMAJ piensa que la legislación se ha quedado corta y es contradictoria, pues es legal comprar y vender servicios sexuales pero es ilegal mantener comunicaciones acerca de esa transacción. En 1985 se prohibió demostrar públicamente la intención de comprar sexo, osea una solución a medias contra la prostitución en la calle, pues existe una proliferación de jóvenes deseosos de dinero rápido para mantener su adición a las drogas y sostenerse económicamente.

En ese sentido, es importante destacar el estudio minucioso que lideró el Consejo Permanente de la Juventud en Montreal en el 2004, llamado “Vue de Rue” que entregó los testimonios de jóvenes homosexuales, bisexuales y heterosexuales de Montreal que se iniciaron en la prostitución desde la tierna edad de 11 años y continúan prisioneros de la explotación de su cuerpo y la adición a drogas como la cocaína, la heroína, el crack o calmantes como Dylau.

Cuando terminé de leer este informe me quedaron muchos interrogantes sobre si es efectivo que la responsabilidad de la educación sexual recaiga solamente sobre los profesores de los colegios y si se está haciendo algo para implicar más a los padres de familia. Si dentro de todos los programas de recibimiento a los nuevos inmigrantes se les advierte de estos flagelos, pues conozco varias familias que han llegado a vivir a Montreal justo a estos sectores deprimidos, sin saber nada de esta problemática o peor aun, si las autoridades sanitarias son concientes de la falta de protección sexual de muchos jóvenes que ejercen la prostitución, quienes urgidos por la ansiedad de no perder sus clientes, no se protegen adecuadamente.